En una extensa entrevista realizada en el marco de su última sesión en el Honorable Concejo Deliberante, la concejal Jorgelina Soñez realizó un balance de sus diez años de labor legislativa, repasó momentos significativos de su carrera política y compartió los avances de uno de los proyectos más importantes que impulsó: la creación del Centro Municipal de Equinoterapia en Chacabuco.

Soñez inició la charla recordando que su reciente sesión fue la número 1.020 de su trayectoria, un recorrido que comenzó en 2015 y que, según expresó, estuvo profundamente marcado por el vínculo constante con los vecinos de las distintas localidades del distrito. Aseguró que la política, para ella, 'no es previsión sino entrega', y que el rol del concejal implica un compromiso cotidiano que va mucho más allá de las dos reuniones mensuales que suelen ser visibles. En ese sentido, destacó su función como puente entre los ciudadanos y las áreas municipales, trabajando de manera permanente para resolver problemas y acompañar necesidades.

La concejal señaló que siempre mantuvo una presencia activa en la comunidad, participando de eventos, reuniones y actividades barriales. Con humor, comparó ese nivel de involucramiento con el de otros funcionarios menos visibles, y remarcó que la cercanía con la gente es un valor esencial para el ejercicio de la política.

Durante la entrevista también se abordaron aspectos más personales. Soñez compartió un momento cálido junto a la entrevistadora, recordando que ambas son 'consuegras', y reflexionó sobre el desafío de equilibrar la vida familiar con las responsabilidades públicas. Confesó que, pese a las dificultades, su labor política le dejó experiencias profundamente emocionantes, como la entrega de terrenos municipales y los sorteos de lotes, instancias que —según destacó— generan alegrías genuinas en quienes acceden a un paso tan importante para su futuro.

En su análisis sobre el clima político actual, la concejal expresó preocupación por el aumento de la agresividad en el debate público y lamentó el desgaste de la verdadera militancia, entendida como la presencia sostenida junto a los vecinos y no como una actividad circunscrita a épocas electorales. Criticó la rigidez de ciertas posturas partidarias y reivindicó la necesidad de trabajar de manera articulada, sin importar la pertenencia política, siempre priorizando el bienestar de la comunidad.

Uno de los momentos más relevantes de la charla estuvo dedicado al proyecto del Centro Municipal de Equinoterapia, una iniciativa que Soñez impulsa desde 2016 y que finalmente logró avanzar en los últimos meses gracias al respaldo del Ejecutivo. Explicó que la propuesta, se desarrolla junto a profesionales, buscando ofrecer terapias asistidas con caballos para niños y adultos con diversas patologías, especialmente en un contexto donde los diagnósticos de autismo y otras condiciones vinculadas al desarrollo han crecido. Relató el 'vínculo mágico' que se genera entre las personas y los animales, y aseguró que la instalación de un centro de estas características en una ciudad grande como Chacabuco representa un paso fundamental para la inclusión y el bienestar de muchas familias.

Soñez agradeció al intendente por escuchar la propuesta e impulsar su materialización, destacando que este proyecto, sumado al presupuesto participativo, constituye uno de los sueños que se propuso concretar antes de dejar su banca.

Además, habló sobre la dinámica política local y la necesidad de fomentar el trabajo conjunto sin antagonismos. Ponderó la disponibilidad del actual intendente para colaborar pese a diferencias partidarias y reflexionó sobre la importancia de la comunicación clara para evitar malentendidos, como ocurrió recientemente en un debate comunitario por el nombre de una plaza.

La concejal también se refirió al clima social en redes, señalando que muchas veces la negatividad surge de la falta de información y del impulso a reaccionar de manera agresiva. Invitó a recuperar el respeto y la escucha activa, valores que considera fundamentales tanto en la vida pública como en la privada.

Sobre el final, compartió experiencias vinculadas a su larga trayectoria de trabajo social, en la que participó de iniciativas solidarias y proyectos educativos, y describió con preocupación el aumento de necesidades en los barrios, donde muchas familias luchan por llegar a fin de mes pese a su esfuerzo diario.

En su reflexión final, Soñez subrayó que la verdadera política requiere presencia cotidiana, compromiso visible y una vocación de servicio que no termina con el mandato. Con emoción, celebró los avances del Centro de Equinoterapia y afirmó que seguirá colaborando con la comunidad, esté o no ocupando un cargo institucional.